TRES FIGURAS EN UNA HABITACIÓN
óleo sobre lienzo 218 x 157 cm
Tate Gallery Londres
Con Tres figuras en una habitación de 1964 , Bacon recupera el tríptico , la tipología utilizadas veinte años atrás en Tres estudios para figuras en base de una Crucifixión y hasta entonces sólo había vuelto a emplear en Tres estudios de cabeza humana .
En esta ocasión las diferencias son tan notables que incluso revelan que, durante este período , el uso del tríptico había sido motivo de reflexión para Bacon, y que había sufrido una evolución paralela a la de otros motivos poéticos . Los motivos tales como el deseo de expresar el cuerpo humano acercando cada vez más la materia carnal , trastornada de forma muy traumática y bañada de sangre , o bien la intención de captar la figura en circunstancias comunes de la existencia , imprimiéndole una dimensión trágica como un mito arcaico , en esta ocasión están estrechamente vinculados a la nueva formulación triple del apoyo.
Al contrario que en trabajos anteriores , a partir de este momento los lienzos de los tripticos adquirirán proporciones monumentales hasta el punto de equipararse a las más grandiosas tablas de altar de la pintura sacra o a su capacidad para crear un nuevo universo iconográfico completamente envolvente . Con la recuperación de este valor de la tradición pictórica a través de los grandes tripticos realizados a partir de 1964 , Bacon logra absorber en la pintura todo el espacio de lo visible . Esta nueva concepción del tríptico es un elemento intrínseco de la forma y, por tanto, queda vinculado al resto de componentes de la obra , como las relaciones entre espacio, tiempo, figura y colores. Esto supone una innovación radical en lo más profundo de la poética de Bacon.
Por primera vez, su pintura transforma la experiencia existencial en la propia materia esencial . Las imágenes obran en relación a todo lo realista o convencional y, por tanto, ajeno a la transformación artística , con distanciamiento casi sagrado . La apremiante relación entre figura y observador que, en la obra de Bacon, había dominado hasta entonces el lienzo individual en el tríptico se diluye extendiéndose a lo largo de una insólita extensión del campo de la pintura.
En Tres figuras en una habitación , la figura es fruto de interrupciones repentinas del flujo vital, contracciones y espasmos que bloquean la continuidad de lo verosimil en imágenes alteradas e inexplicables en la lógica convencional
Fuente:
Tamara Tamaral
24-10.2014