La NASA advirtió que una nueva explosión solar provocará que una tormenta de llamaradas penetrará en la atmósfera y comprimirá el campo magnético, algo que podría afectar a satélites y a instalaciones eléctricas.
Una explosión solar, de las más fuertes registradas en los últimos meses, produjo una serie de llamaradas que colisionaron con la Tierra dejando unas impactantes imágenes recogidas por los observatorios de todo el mundo. Está previsto que a lo largo de esta semana se produzcan nuevos impactos.
La llamarada solar, enmarcada dentro de la categoría M3 -una de las más potentes- y provocada por la mancha del Sol 1401, chocaron con la Tierra y tiñeron los cielos de países como Australia, China, India, Escocia, Inglaterra, Rusia y en regiones nórdicas. Los satélites quedaron expuestos a la compresión del campo magnético que sufrió nuestro planeta, aunque de momento no se han reportado posibles problemas en los mismos ni en las instalaciones eléctricas.
El Observatorio de Dinámica Social de la NASA fotografío el momento de la explosión en la mancha solar 1401, aunque los efectos del impacto de la tierra pudieron ser vistos a simple vista y fueron retratados por miles de aficionados. Los análisis de expertos astrónomos a los que pudo tener acceso Hechos de Hoy demuestran una inusual actividad explosiva en el Sol.
Recientemente, otra explosión produjo que una llamarada solar impactara contra Venus, y los expertos señalan que una nueva podría producirse en las próximos horas y días también con la Tierra como receptora del impacto. De momento se desconoce si estas nuevas llamaradas solares chocarán de forma completa o parcial contra nuestro planeta.
Pese a que el Observatorio del Clima Espacial mandó un mensaje de tranquilidad sobre los efectos de esta lluvia de llamaradas solares, un reciente informe de la Comisión Europea determinó que hay un riesgo creciente de que se produzca un evento tecnológico de dimensiones catastróficas producida de una tormenta solar.
Hechos de Hoy