Parece que está todo inventando en cuanto a métodos de obtención de energía, pero no, es increíble como surgen sorprendentes ideas. Donde una persona ve un balancín, David Sheridan, de 23 años de edad, ve una forma de obtener energía. Y es que es por todo el mundo conocida la inagotable energía de los niños.
El curioso invento de David aprovecha el movimiento del balancín que utilizan los niños en los parques para generar energía eléctrica que a través de un cable subterráneo, podría ser llevado hasta un aula cercana.
Con 10 minutos de movimiento de este balancín, se podría alumbrar una clase durante toda la tarde. Aunque de momento este invento puede resultar muy costoso para los resultados que se obtienen, Sheridan ha ganado un premio de 10.000$ con el que pretende desarrollar aun más el sistema.
Este novedoso invento no es desde luego el primero en utilizar la inagotable energía de los niños. La marca Sony ya ha creado unos curiosos juguetes cinéticos que aprovechan el movimiento y la energía solar, ya que disponen de un pequeño panel solar.
Puede que dentro de unos años este tipo de inventos no nos sorprendan tanto y al caminar seamos capaces de cargar el móvil, el mp3 o cualquier tipo de pequeño aparato eléctrico que tengamos a mano.