12 de septiembre de 2011

Monólogo: El TURISMO RURAL

TURISMO RURAL


      Se trata de un deporte nacional que antes se llamaba 'ir al pueblo'.



      La diferencia es que si vas a tu pueblo es gratis, y si haces
      Turismo Rural vas a un pueblo que no es tuyo y pagando una pasta.

      Para hacer turismo rural no vale cualquier pueblo. Tiene que ser un
      pueblo 'con encanto'.

      -¿Y qué es un pueblo 'con encanto'? Pues un pueblo que sale en una
      Guía de pueblos 'con encanto'. Si es que se cae por su propio peso.

      A estos pueblos se suele llegar a través de una carretera comarcal
      'con encanto', que es una carretera con tantos baches y tantas
      curvas que cuando llegas al pueblo estás 'encantao' de bajarte.

      Y cuando entras al bar intentas integrarte con los vecinos.

      -  ¡¡¡Buenos días, paisanos!!! ¿Qué es lo típico de aquí?
      Y el del bar piensa: 'Pues aquí lo típico es que vengan los
      gilipollas de la ciudad los fines de semana a dejarse doscientas mil
      pesetas'.

      Lo siguiente es alojarse en una casa rural o 'casa con encanto', que
      es una casa adornada con muchas vasijas y ristras de ajos en el
      techo, que no tiene ni tele, ni radio, ni microondas.

      Eso sí, tiene unos mosquitos trompeteros que por la noche hacen más
      ruido que una Derbi Coyote.

      Luego te das cuenta de que los del pueblo viven en unas casas que no
      tienen ningún encanto, pero tienen jacuzzi, parabólica, Internet y
      portero automático.

      Tu casa no tiene portero automático, pero tiene una llave que pesa
      medio kilo.

      Otra ventaja que tiene hacer turismo rural es que puedes elegir
      entre una casa vacía o vivir con los dueños.

      Estupendo.

      Te vas de vacaciones y además de la tuya tienes que aguantar una
      familia postiza. Que por la noche tú quieres ver la película, ellos
      los documentales, y te planteas:

      '¿Quién manda más, yo que he pagado 600 euros o este señor que vive
      aquí?'.

      Pues gana él, que tiene garrote.

      Y encima te dicen que tienes la 'posibilidad de integrarte en las
      labores del campo'. Que quiere decir que te despiertan a las cinco
      de la   mañana para ordeñar a una vaca. ¿No te jode? Es como si te
      vas a una gasolinera y te tienes que poner tú la gasolina, o como si
      vas a un McDonalds y tienes que recoger tú la bandeja. O sea, lo
      normal.

      Así que te levantas a las cinco para ordeñar a las vacas.

      Que digo yo:  ¿por qué hay que ordeñar a las vacas tan temprano?
      Si la leche está ahí.
      ¿No se pueden ordeñar después del aperitivo? Yo creo que esto es
      fastidiar por fastidiar, porque a la vaca le tiene que sentar como
      una patada en las ubres que la despierten a las cinco de la mañana
      para que le toque las tetas un extraño.

      Que la vaca te mira como diciendo: 'Tío, si quieres leche vete a la
      nevera coge un tetra brick'. Es que son ganas de molestar.

      Pero el 'encanto' definitivo son las 'actividades al aire libre'.

      Como cuando te ponen a hacer senderismo, que es lo que habitualmente
      se llama andar, y consiste, pues eso, en poner un pie delante de
      otro hasta que no puedas más, mientras los del pueblo te adelantan
      en un 'todoterreno' con aire acondicionado..

      Pero tú encantado. Vas por el campo como abducido. Te vuelves
      bucólico y todo te parece  impresionante: ves una 'caca' de vaca y
      sueltas:

      'Ummmmmh qué olor a pueblo.' ¿A pueblo? A pueblo no, huele a mierda.
      Eso sí, a mierda 'con encanto'.

      Y todo, sea lo que sea, te sabe a gloria: en el mesón te ponen dos
      huevos fritos con chorizo y tú en tu ciudad no te comes estos
      huevos, ni estos chorizos. Y le dices al camarero:

      - 'Oiga ¿a qué este chorizo es de matanza?'
      - 'Pues casi, porque a punto estuvo de matarse en la curva el del
      camión de Campofrío'.

      De repente oyes unas campanadas y dices:

      -'¡Ah!. ¡Qué paz!. No hay nada como el sonido de una campana.'
      Y el del bar te dice: '¡Pero si está grabado! ¿No ves el altavoz del
      campanario?'

      En ese momento te preguntas si los sonidos de las gallinas y de los
      grillos no vendrán en un CD: Rural Mix2005', 'Los 101 Mayores Éxitos
      campestres.'

      De lo único que estás seguro es de que los mosquitos trompeteros son
      de verdad. Que pareces un Ferrero Roché con varicela.

      Me imagino al alcalde: - 'Queridos paisanos: este verano, para
      incrementar el turismo, vamos a importar más mosquitos del Amazonas,
      que el año pasado tuvieron mucho éxito. Y quiero ver a todo el mundo
      con boina, nada de gorritas de Marlboro. ¡Y haced el favor de
      pintaros el entrecejo, que no parecéis de pueblo! Y las abuelas Nada
      de TOP less en el río, que espantáis a los mosquitos..

      Ah, y por cierto: Este año no hace falta que nadie haga de tonto del
      pueblo.

      ¡Con los que vienen de fuera ya vale!