Llorens enseña ayer la multa que recibió. eduardo ripoll |
Llorens relata los hechos que le obligan a pagar 200 euros, que en realidad son 100 con el descuento del 50%. Allá por el mes de febrero circulaba una mañana, a eso de las 11, por el túnel de la avenida del Cid, donde Llorens cree que hay un radar. "Al pasar por ahí -explica- no iba a más de 35 o 40 kilómetros por hora, porque intentaba no pasar de los 50 kilómetros por hora porque sospecho que ahí hay un radar".
Sea como sea, el radar le capturó, aunque la multa no fue notificada en el primer momento. De hecho, tal como se señala en el documento al que ha tenido acceso Levante-EMV, la Policía no pudo informarle "por imposibilidad de detener al vehículo infractor, debido a la situación de la circulación".
Llorens comenta que la compañía de seguros que lleva el recurso que ha interpuesto sobre la denuncia rió cuando se enteró del motivo por el que no se le pudo informar de que circulaba demasiado lento. "¿Qué pasa, que iba tan despacio que no pudieron detenerme"", se pregunta Llorens entre risas.
El conductor comenta que, en su opinión, circular a menos de 50 kilómetros por hora "no es entorpecer". "¿Cuando hay un carril vacío y vas a 60, a quién molestas", explica Llorens, que señala que recurre la multa porque no está de acuerdo con ella. "Esto se cae por todos lados", asegura un convencido Llorens.
El conductor, por su parte, lo tiene claro. Para él, es "puro afán recaudatorio". Cree que está bien que haya denuncias por coches en segunda fila, o por conductores que cogen sus vehículos borrachos, "pero no por eso". "Son ganas de ganar dinero y no de controlar el tráfico", asegura el multado.